domingo, 15 de noviembre de 2009

Cambios


Hay días en los que despiertas queriendo cambiar todo a tu alrededor, pides desesperadamente que algo suceda, te dedicas a esperar que esos cambios lleguen, pasas el día solo haciendo las mismas cosas, siguiendo la rutina de la que tanto quieres salir. Y luego al final del día te preguntas que ¿Por qué nada nuevo ocurrió?


Los cambios no tienen días, ni horarios simplemente hay que tomar la rienda y dar chance a que esas cosas nuevas solo ocurran, no hay porque esperar el lunes para iniciar la dieta, no hay que esperar que el amor llegue para amar, no se espera que la vida te pase por el frente las situaciones; ellas pasan por tu vida a diario así que se aprende a verlas. Cambia todo aquello que quieras cambiar ve desde lo más simple de tu vida hasta lo más complejo. A veces solo hace falta un cambio pequeño para que los cambios grandes empiecen a suceder.

La vida me ha puesto tareas duras estos dos últimos años, cambios grandes, decisiones que tomar junto con problemas que sobrellevar y solucionar. Cuando llegaron tuve miedo luego, me di cuenta que estos cambios eran para bien y que las enfermedades sirven para mostrarte la fragilidad de nuestra existencia. Después de esto la vida me parece mas sencilla, no niego que a veces me la complico, pero que se puede hacer aun sigo siendo humana.

Todo es transitorio (personas animales y cosas) lo que hoy tienes a tu lado mañana, tal vez, no estén. Por eso la realidad en aquel refrán de reza “No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”.

P@scu@

sábado, 19 de septiembre de 2009

Reflejos


Hace mas de un año leí esta historia que hablaba de dos bomberos que entran a un bosque a apagar un incendio pequeño, al salir del bosque llegan a la orilla de un riachuelo uno con el rostro inmaculadamente limpio el otro con el rostro cubierto de cenizas, de allí surge una pregunta: ¿cual de los dos ira corriendo a lavarse el rostro?

Creí que la respuesta lógica seria que el que tenia el rostro cubierto de cenizas, pues que les parece me equivoque el que saldría corriendo seria el que tenia el rostro limpio, ya que al ver al otro pensara que estaba en las mismas condiciones y viceversa.

En ese momento hice esta reflexión:

"Hoy entendí el porque en muchas relaciones que terminan siempre hay alguno de los involucrados, que no entiende porque para él todo esta en perfectas condiciones.

Uno suele verse en la otra persona amorosa y entregando todo para que la relación fluya y crezca. Esa otra persona solo ve en nosotros toda la ceniza que llevamos en el rostro, hasta que se opaca su propio brillo y se marcha de nuestro lado. Si esa otra persona nos importa debemos hacer muchas cosa para recuperarla la primera es pararse frente al espejo para ver cuan sucia esta nuestra faz, ahora ya estamos listos para ir y lavarnos en ese riachuelo, solo en ese entonces podremos recuperar lo perdido.

No hay nada más cierto como que para amar hay que amarse."

Hoy a más de un año de eso me encuentro explicando a una persona el porque lo nuestro fallo, explicándole que a pesar de que trate mis fuerzas y ganas no fue suficiente. Tal vez mi reacción de ahora fue lenta, debí hacer esto antes de que las cosas empeoraran. Porque me limite a después de la tormenta poner mi mejor cara y seguir.

Para ver las realidades siempre necesitamos vernos nosotros mismo antes de ver a los demás, reconocer que no solo basta con lavarse el rostro…

P@scu@




P@scu@

miércoles, 16 de septiembre de 2009

El Inicio

La mujer que hoy esta en el espejo no es la mujer que yo pensé ser, no es mala NO, pero no es la que yo espere ser. Un 28 de diciembre (el día de los santos inocentes, ahora pregunto ¿será una marca?) en fin llegue al mundo hace 31 años, unos meses y unos días. Niña al fin imaginaba un hogar “FELIZ” (¿Qué es Feliz?), el típico cuento de hadas y el clásico juego de papá y mamá. El tiempo pasando y los sueños allí, esperando el príncipe azul, el que me haría “FELIZ”. Cuando llegaron las hormonas como leña avivaron la fantasía; ahora si llega el héroe de la historia, el que salvaría el día y el del colorín colorado. Obvio algunos voltearon a mirar y obvio que cuando paso ninguno era el que yo esperaba (por chiquito, por feo, por bello, por Don Juan, etc.) uno que al verme en sus ojos mi corazón se voltearía. Mas años pasaron y llego al fin el que ERA porque ese ERA, después de un año de relación me esperaba el matrimonio y un bebe en nueve meses (el primero de los muchos que quería).

Pasaron los años muchos buenos como siempre lo soñé, un día llegaron las peleas, la falta de comunicación y la deslealtad (no infidelidad). El vaso se lleno y todo acabo, sin colorín colorado, sin FELICES para siempre; pero si con aprendizaje y experiencia.

Ese FELIZ, que no depende de una pareja, ni de un ser a nuestro lado. Solo depende de nosotros mismos (trillado pero cierto)…

Lo que sigue es algo que leí por allí:

“Quererte para querer, respetarte para respetar, y aceptarte para aceptar, ya que nadie da lo que no tiene dentro de sí.
Ninguna relación te dará la paz que tú mismo no crees en tu interior.
Ninguna relación te brindará felicidad que tú mismo no construyas.
Sólo podrás ser feliz con otra persona cuando seas capaz de decirle bien convencido: ¡No te necesito para ser feliz!
Sólo podrás amar siendo independiente, hasta el punto de no tener que manipular ni manejar a los que dices querer.
Sólo se podrá ser feliz cuando dos personas felices se unan para compartir su felicidad, no para hacerse felices la una a la otra.”

Como buena mujer adoro el drama y espero volverme enamorar, pero esta vez siendo FELIZ desde antes.

P@scu@